LOS ESPACIOS DEL OLVIDO


«Mi credo es que ese poeta que jamás escribió una línea y que yace en la encrucijada vive todavía. Vive en ustedes y en mí y en muchas otras mujeres que no nos acompañan esta noche, porque están lavando los platos y acostando a los chicos. Pero vive, porque los grandes poetas no mueren: son presencias continuas, sólo precisan una oportunidad para andar entre nosotros de carne y hueso.»
(Virginia Woolf, Un cuarto propio)

«No era tanto el papel de una mujer como esposa como esas pequeñas ocasiones en que el papel estaba de algún modo ausente y, durante unos pocos segundos, se reinventaba a sí misma a partir de algo que la sociedad no reconociese como real.»
(Greil Marcus, Rastros de carmín)



Durante algún tiempo he indagado sobre la historia de las mujeres en mi familia a través de fotografías y de sus relatos. En este proceso, además de reconocerme en sus rasgos físicos y crear un vínculo generacional, he notado que muchas poseían inquietudes artísticas que nunca desarrollaron. Esta serie es un homenaje para las mujeres que me dieron vida y una evocación de las ideas que ellas dejaron en mente.


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